lunes, 29 de octubre de 2012

Beata Madre Candelaria de San José

Eumenes Fuguet Borregales (*)
   En la población de Altagracia de Orituco, municipio José Tadeo Monagas del estado Guárico, nace el 11 de agosto de 1863 Susana Paz Castillo Ramírez, fundadora de la Congregación Hermanas Carmelitas de la Tercera Orden Regular de Venezuela; hija de Francisco de Paula Paz Castillo, naturista con conocimientos prácticos de medicina y María del Rosario Ramírez; ambos caraqueños que huían de las  persecuciones y penalidades de la Guerra Federal. En su ascendencia paterna figura Doña Susana Paz Castillo su abuela, prima del Libertador y de varios próceres emancipadores, uno de ellos Juan, al ser expulsados por Monteverde en 1812, formaba con el sacerdote chileno José Cortés de Madariaga, denominados “Los Ochos Monstruos”. 
    La vida de Susana está signada por el sacrificio, amor al prójimo y dedicación a los valores cristianos; su padre fallece cuando ella contaba apenas siete años y su madre, a los veinticuatro años. Primero le correspondió ayudar a la madre en el sustento de sus tres hermanos,  luego Susana tuvo que afrontar la crítica situación familiar, ampliando casi en forma paralela su beneficencia con los menesterosos y enfermos con gran sensibilidad, atendiéndolos en forma  precaria en una casa semi abandonada ubicada al lado de la iglesia parroquial. 
   Quienes tuvieron la suerte y honra de tratarla, la consideraban como una Santa. Su formación educativa se vio limitada, apenas pudo recibir conocimientos elementales y cursos de manualidades, bordados y costura. Junto a varias colaboradoras que aspiraban ser religiosas y con la autorización de la iglesia local, Susana designada Directora, funda en 1903 un pequeño hospital en Altagracia de Orituco llamado  “San Antonio”. El 13 de septiembre de ese año, con autorización del Obispo diocesano, luego de realizar talleres espirituales, viste el hábito de las Hermanitas de los Pobres; cambia su nombre por el de Candelaria de San José, denominación que toma en honor a su madre. Le acompañaron en esta nueva congregación varias coterráneas empeñadas en servirle al Supremo Creador mediante la atención a los de menos recursos: Mercedes Malaver por Hermana Trinidad de San José; Natividad Pérez Medina por Hermana María de San José; Adelina Doménico por Hermana Dolores de San José, y Clara Pérez por Hermana Providencia de San José. Al año siguiente también un 13 de septiembre se les unió Ramona Aragort con el nombre de Hermana Elvira de San José. El 31 de diciembre de 1910, al ser aceptadas como religiosas según el ceremonial de las Hermanitas de los Pobres de Maiquetía, nace oficialmente la Congregación de las Religiosas Carmelitas de la Tercera Orden Regular, teniendo a la  Madre Candelaria como Superiora durante treinta y cinco años. 
    Actualmente son denominadas Religiosas Carmelitas de la Madre Candelaria. Estas nobles y sacrificadas hermanas lograban el  mantenimiento del hospital a través de la limosna que recogían de casa en casa y de pueblo en pueblo. La Madre María Candelaria recordando a sus ascendientes que lucharon por legarnos independencia indicaba que: “nuestros Libertadores conquistaban la Patria Terrenal, nosotros conquistamos la Patria Celestial”. El afán de ayudar al prójimo y a pesar de sus quebrantos de salud  las inspira  fundar congregaciones y hospitales en varias ciudades de Venezuela, tales como  la de Porlamar, Upata y Cumaná; sostenidos a fuerza de voluntad y de las colectas que diligentemente procuraban. En 1937 la Congregación contaba con cuarenta y cinco religiosas, nueve instalaciones hospitalarias, dos colegios y un seminario. Encontrándose el 29 de junio de 1919 en proceso post operatorio en el Hospital Vargas de Caracas, víctima de un atropello automovilístico, ingresan al Dr. José Gregorio Hernández, la Madre Candelaria estuvo orando ante el “Siervo de Dios”. Anciana y enferma aún se dedicaba a la formación de las novicias. Entrega su alma al supremo Creador en Cumaná el 31 de enero de 1940, fue velada en la Catedral de dicha ciudad; sus restos fueron trasladados a Caracas el 28 de diciembre de 1954; fue Beatificada oficialmente por el Vaticano el 24 de abril del  2008, convirtiéndose en la segunda venezolana en  alcanzar la gloria de los altares luego de la Madre María de San José.

Historia y Tradición


(*) Gral de Bgda.                                                                               eumenes@gmail.com
                                                                                                                @eumenesfuguet 

domingo, 28 de octubre de 2012

151 años de la fundación del Colegio de Ingenieros de Venezuela / 28 de octubre de 1861



Eumenes Fuguet Borregales (*)

    El 28 de octubre, día de San Simón, servirá para conmemorar el año Sesquicentenario de haberse fundado en 1861, el prestigioso Colegio de Ingenieros de Venezuela, establecido inicialmente en la sede del Colegio Santa María de Caracas, ubicado entre las esquinas de Veroes a Jesuitas. El día anterior, veintidós profesionales de la ingeniería, civiles y militares se habían reunido en el mencionado instituto, donde presididos por los tenientes coroneles Juan José Aguerrevere y Lino Revenga, establecieron la fecha y hora para instalar la importante institución para dar cumplimiento al Decreto Presidencial de Don Manuel Felipe Tovar (1803-1866), suscrito el 24 de octubre de 1860, el cual reglamentaba la Academia de Matemáticas fundada en 1831 por el sabio Juan Manuel Cagigal y Odoardo (1803-1856). 
   De común acuerdo y según Acta, los asistentes a la reunión denominaron al grupo: "junta Preparatoria del Colegio de Ingenieros", presidida por el teniente coronel Juan Aguerrevere. La instalación se fijó para las dos de la tarde del día 28, convocándose a todos los ingenieros, procediéndose a elegir con votación secreta la primera Junta Directiva quedando Director el teniente coronel Juan José Aguerrevere, como Vice Directores: teniente coronel Lino José Revenga e ingeniero Felipe Esteves y Secretarios: los tenientes Agustín Aveledo y Francisco de Paula Acosta. Los primeros afiliados del naciente Colegio conformaron un grupo de sesenta y un miembros, gracias a la feliz iniciativa del Ing. Olegario Meneses de acuerdo a informe entregado en 1844 al Ministerio de Guerra y Marina. 
   El señor general Víctor Maldonado Michelena, digno oficial del arma de Ingeniería, nos ilustra en brillante artículo: "la venida a Venezuela del coronel de ingenieros Nicolás de Castro, significó el comienzo de una nueva y verdadera etapa de progreso, porque con él se iniciaron en 1760 los primeros estudios de Geometría y Fortificación Regular y de Campaña, los cuales demarcan el momento feliz en que comenzaron simultáneamente en el país los estudios básicos de las carreras de Ingenieros y Militar" . El Colegio de Ingenieros, permaneció adscrito al Ministerio de Guerra y Marina, hasta 1881, cuando el Presidente de la República, general Antonio Guzmán Blanco, decidió que dependiera del Ministerio de Instrucción Pública. 
   En 1958 el Colegio de Ingenieros logra independizarse del Ejecutivo Nacional en virtud de aprobarse la "Ley de Ejercicio de la Ingeniería, la Arquitectura y Profesiones Afines". De nuestros próceres, el máximo representante de la Ingeniería en Venezuela es el general en jefe Antonio José de Sucre (1795-1830), Gran Mariscal de Ayacucho, Prócer más puro de la Independencia americana y Caballero de la Historia", destacándose tempranamente al realizar a los trece años de edad, sus estudios iniciales en Cumaná con el ingeniero español Juan Pires y Correa, aprendiendo matemáticas y fortificaciones; trasladado a Caracas, en 1810 Sucre ingresa a la recién creada Escuela de Ingeniería Militar dirigida por el coronel español José Mieres, donde tuvo como compañeros a: Carlos Soublette, y Francisco Avendaño, constituyendo el incipiente Colegio de Ingenieros Militares de Caracas, donde aprenden: táctica Militar, Algebra, Dibujo, Fortificaciones y Geometría. Con grado de teniente de ingenieros en 1811, la Junta Suprema de Caracas envía a Sucre a la isla de Margarita para supervisar trabajos de mantenimiento en las fortificaciones. En las diversas campañas donde participo el joven ingeniero militar, se movilizaba con su regla y escuadra, orientándose por la posición de las estrellas; en la población de Cuenca- Ecuador, construyó un hospital, elaboró la primera Ordenanza Municipal de Aseo Urbano de la cual se tenga conocimiento en hispano América. Como práctica frecuente, dibujaba las cartas topográficas de cada escenario bélico; estando en Potosí, funda una Escuela de Minas, eliminó los cementerios de las iglesias, demarcó carreteras, instituyó las materias de ciencias exactas, astronomía, trigonometría plana y esférica, y el inglés, rectificó los planos de la Catedral de La Paz y mejoró el diseño interior de la iglesia de Chuquisaca, en su denso aporte el futuro Mariscal funda un Servicio Postal, propicia la fundación de la Academia Militar y Universidad de La Paz, dictando además, medidas para protección de lagunas y ríos. En honor de Antonio José de Sucre, las clases en Bolivia se inician el 3 de febrero, día de su nacimiento. Por estas y muchas razones, al general Sucre se le considera, "el Precursor de la Ingeniería Militar en Venezuela"... Felicitaciones a los constructores de progreso.
(*) Gral. de Bgda.  

Dr. Caracciolo Parra Pérez, localizó los documentos de Miranda

Eumenes Fuguet Borregales (*)
El 19 de marzo  de 1888 nació en Mérida, el distinguido abogado, diplomático, escritor e historiador Caracciolo Parra Pérez, hijo de Don Ramón Parra y Doña Juana Pérez. Realizó su formación y preparación académica en el suelo natal, incluyendo el doctorado en Ciencias Políticas en 1906 con su tesis El Juicio del Divorcio. Realizó estudios de posgrado de Derecho en Europa durante cuatro años. De regreso al país es designado a cumplir funciones diplomáticas en Francia en 1913; apasionado por la historia patria dedicó valioso y largo tiempo en  investigar y escribir, con amplia capacidad para entregarnos  sin apasionamientos  episodios del destino nacional. Publicó en idioma francés “Páginas de Historia y Polémica” en 1918, traducidas al castellano en 1943. Enviado en 1916 a Suiza como Encargado de Negocios. En 1925 escribió en francés una importante obra de nuestro precursor “Miranda y la Revolución Francesa”; con esta obra inicia su extraordinaria carrera como historiador. Importante publicación cuyo fin fue desvirtuar algunas opiniones tergiversadas de historiadores franceses sobre nuestro ilustre paladín forjador de libertades, único americano cuyo nombre se encuentra en el Arco de Triunfo de París desde el 29 de julio de 1936. El Dr. Parra Pérez denominaba al “Más Universal de los venezolanos”, estudiado durante dos lustros como “El Incomprendido”·
Sus  profundas investigaciones, le facilitaron en 1926 conseguir el Archivo de Miranda que se encontraba en Inglaterra procedente de Curazao, cuando fue salvado  y sacado a tiempo por el francés Pedro Antonio Leleux y el guayaquileño José Antepara en el navío “Saphire” la noche del 30 de julio de 1812; recordando que en la madrugada del 31, Miranda fue apresado en la residencia de José María de Las Casas donde  pernoctaba con la idea de dirigirse hacia Curazao y Cartagena para continuar su afán emancipador; Este archivo había sido entregado a la firma inglesa  Robertson y Belt en manos de William Spencer Robertson; las diligencias del Dr. Parra Pérez motivó al gobierno nacional la adquisición y custodia del invalorable material histórico, que permaneció un buen tiempo en la Academia Nacional de la Historia y a partir del 2010 trasladado al Archivo General de la Nación. El acucioso Dr. Caracciolo Parra escribió en 1925 “Historia de la Primera República”. Encontrándose desde 1927 en funciones diplomáticas en Italia, escribió ese año “Bolívar, contribución al estudio de sus ideas políticas”; en 1932 publica “El Régimen Español en Venezuela”. En sus brillantes publicaciones nos mostraba una maravillosa secuencia de los hechos ejemplares que nos legaron independencia y soberanía. De Italia se traslada con igual cargo diplomático a Inglaterra. De nuevo en Venezuela el Presidente López Contreras lo designa ministro de Educación en marzo de 1936, cargo que ocupa por pocas semanas para ser enviado en comisión a Buenos Aires, representando al país en la Conferencia Interamericana de Consolidación de la Paz. Su experiencia en el servicio exterior le permitió ser designado a Suiza en 1937; enviado a España en 1939. El gobierno nacional en la persona del general Isaías Medina Angarita le asigna el ministerio de Relaciones Exteriores durante el período 1941- 1945; le correspondió a nuestro biografiado ejercer en forma interina la presidencia de la República en dos oportunidades: del 27 de julio al 24 de agosto de 1943 y del 15 de enero al 2 de febrero de 1944. En 1945 es el representante de Venezuela ante la reunión preparatoria para el establecimiento de la Organización de las Naciones Unidas; igualmente participó en la preparación del Proyecto de Declaración de los Derechos Humanos  que pondría en vigencia el alto Tribunal de Justicia de La Haya. Derrocado el Presidente Isaías Medina Angarita por un golpe cívico militar el 18 de octubre de 1945, el Dr. Parra renunció al cargo de ministro de Relaciones Exteriores, fijó residencia en Paris donde continuaría su prolífica producción histórica. En 1946 publicó un extenso trabajo sobre el general en jefe, el margariteño Santiago Mariño, comprendiendo ocho volúmenes. El Dr. Caracciolo Parra, ocupó importante cargo diplomático en la UNESCO entre 1949 y 1958. La Academia Nacional de Historia lo recibió como Individuo de Número el 5 de julio de 1960, asignándole el Sillón Letra “T”, presentando su Discurso de Incorporación con el tema: “Concepto sobre la historia”; vibrante elogio a la libertad. Emotivas palabras contestadas por el porteño y académico Ramón Díaz Sánchez. Falleció el Dr. Caracciolo Parra Pérez, meritorio representante de nuestro país, y acucioso historiador en Paris el 19 de septiembre de 1964 a los setenta y seis años de edad; dejó un legado digno del reconocimiento, de su publicación y  divulgación, por su alto valor histórico producto de la investigación en las fuentes indispensables para conocer la verdad verdadera de nuestro incomparable pasado. Una parroquia de Maracaibo e instituciones educativas  llevan su preclaro nombre.
Historia y Tradición
(*) Gral. de Bgda.                                                                            eumenes7@gmail.com          

sábado, 27 de octubre de 2012

AGUAS GUAYANESAS (Metamorfosis)



 Por Ana Carvajal.
                                                                               I
 Entre fusas y semifusas encontré a la musa que me hizo escalar varios tepuyes hasta llegar al Churun Merú, descendí furiosa por sus entrañas esculpiendo el alma de esa montaña, en trenzas de orquídeas y madreselva llegué a mi lecho; convertida en  remanso de aguas tranquilas y cristalinas para deleitar a los nativos y visitantes de ese lugar.
                                                                              II

Rocas ígneas y principescas  escoltan mi recorrido como el  Autana,  el Kukenán y el Roraima,  cuyos nombres de  lengua  indígena han recibido gracias reales  de los Pemones, seres  que habitan   desde el principio esos cenáculos. El  Auyantepuy  de donde  emerge el 
Kerepakupai Venáa    es el Patriarca  de todos ellos  pues  alberga un Ángel y no es plebeyo.
                                                                                 III
Continúo mi viaje cual dromedario como si fuera un serpentario, tallando el cuerpo de esta Princesa tan legendaria, de génesis plasmada en ignotos tiempos del pre cámbrico, quizás fue morada de fieros dragones y dinosaurios ,mi tierra amada es salpicada con mi paleta de mil colores y es por eso la consentida de famosos escritores y pintores.
                                               
                                                                                 I V
Sin  pausas ni sobresaltos  nos transformamos en  majestuosas cascadas fieles testigos  de nuestro espíritu indómito, el Kamá , el  Sapo,  Hacha, Wadaima, Golondrina, Ucaima, el Aponwao, Cortinas de Yuruaní y las pequeñas  quebradas de Jaspe  y  Pacheco son algunos de nuestros  encantos. Es la quebrada de Jaspe la consentida por los viajeros, matizada en rojo escarlata  reposa sus aguas en sílice y cuarzo. Como pueden ver  somos  un bálsamo  si se deciden a visitar nuestra tierra mágica.

                                                                                  V
También  habitamos en  lagunas rojizas como Canaima, retozamos en numerosas cuevas casi todas inexpugnables, semi exploradas y aún vírgenes como la mayoría de los tepuyes, los exploradores quedan rendidos por  nuestra belleza y  casi nadie conoce   las  variadas  especies  que sustentamos. El explorador que más  ha cortejado las tierras que bañan mis aguas  descubriendo especies y también cuevas, tanto en noche como de día, es el insigne Charles Brewer Carías.  .

                                                                                       VI 
Fauna diversa  se alimenta del elixir de nuestras aguas y si es  la flora de las  Orquideas, Bromelias  y los  helechos   siempre se encuentran en eterna floración . Nuestra morada está enclavada en los tepuyes, valles, cuevas, saltos y  en todo los ríos a lo  largo de  nuestra Guayana, pero  este ecosistema es más bien frágil y por eso apelamos a la conciencia de ustedes los seres humanos, quienes  deben cuidarnos y preservarnos para las futuras generaciones y en armonía con los gobiernos   cumplan   señores  el  objetivo siete  de este Milenio.
                                                                                          VII
Antes de besar al Orinoco  nuestras  tostadas   aguas son  atrapadas  en amasijos  de  acero  y  hormigón, sin embargo seguimos  rugiendo cuando  las compuertas se abren de flor en flor y cual avalancha ya   desbocada  regamos   el suelo sagrado del  Caroní, cuna del  fiero Cacique Yarivi y como una doncella en sacrificio  nos ofrecemos   por el progreso de nuestro  país. Para finalizar nunca olvidemos que en nuestras aguas dejó su impronta  y también su estela  el Indio  Sucre Figarella.

viernes, 26 de octubre de 2012

"Crónicas de las Mujeres que inquietan a los Hombres"

Estimados amigos el  próximo  martes 30 de octubre en la Libreria El Buscón a la 6.30 pm, se realizara una tertulia sobre: "Crónicas de las Mujeres que inquietan a los Hombres". Actuará como presentador el historiador profesor Carlos Alarico Gómez, y la tertulia la dirigen el autor del libro Nicomedes Febres junto con el profesor Alarico. Allí conversaremos sobre la vida erótica de las mujeres que han sido dadivosas con su cuerpo en la Historia de Venezuela.

https://mail-attachment.googleusercontent.com/attachment/?ui=2&ik=23421274d2&view=att&th=13a98911f58bbf1c&attid=0.1&disp=inline&realattid=f_h8q18o0b0&safe=1&zw&saduie=AG9B_P9mm3HbO1CLwjrGyMyCLjdB&sadet=1351271475005&sads=Yq8jew_5IS9STgimUloCw01V_Eo

jueves, 25 de octubre de 2012

Bautizo del libro: “El Círculo Valenciano” en el Club Médico Caracas.

eee23/10/2012

Nuevo libro del historiador venezolano Carlos Alarico Gómez “El Círculo Valenciano”

Escrito por:  Madelein Cuellar
“EL CÍRCULO VALENCIANO”  libro original del comunicador e historiador venezolano doctor Carlos Alarico Gómez, fue bautizado en las instalaciones del Club Médico de Caracas y el próximo domingo 28 de octubre, será presentado en el marco de la Feria Internacional del Libro que organiza la Universidad de Carabobo en Valencia.
La obra, editada por el Círculo de Escritores de Venezuela, analiza los factores de poder que privaron durante el régimen de Cipriano Castro, especialmente la participación en su Gobierno del llamado “Círculo Valenciano”, que jugó un papel predominante en la conducción del país durante la primera década del siglo XX.
El Círculo Valenciano llegó a disponer de un inmenso poder, situación que es cuidadosamente revisada por el autor, en un estilo histórico-literario totalmente aferrado a la documentación que encontró en su acuciosa investigación, que contó con el apoyo del doctor Ramón Eduardo Tello, nieto del biografiado, “quien muy generosamente le permitió escudriñar en los papeles de la familia”; y de William Sullivan, historiador de la Universidad de Wisconsin, quien le proporcionó una invalorable data sobre el período estudiado, la cual obtuvo en fuentes norteamericanas.
En esta obra también se analiza la política venezolana desde la invasión de Los Sesenta iniciada el 23 de mayo de 1899 desde Cúcuta, hasta la caída del castrismo en la jornada del 19 de diciembre del año de 1908.
Es de señalar que Carlos Alarico Gómez es profesor universitario, graduado en periodismo e historia. Sus estudios los efectuó en Venezuela, Italia y Estados Unidos, donde obtuvo sus títulos de licenciado, magister y doctor. Entre sus obras publicadas destacan; Miranda periodista, El papel de los medios en el Bloqueo de 1902, Historia de la Hegemonía Andina, El poder andino, Vida y tiempo de Renny Ottolina, El Museo de la Radio, El origen del Estado democrático en Venezuela y el Último Dictador.
Algunas de sus obras han sido publicadas en España y Rumania y ha sido condecorado con las órdenes Andrés Bello, Andrés Eloy Blanco, Francisco de Miranda, José Antonio Páez, José Tadeo Monagas y Cacique Yare, habiéndole correspondido el honor de ser el primer escritor que  ha recibido la medalla Tomás Polanco Alcántara.
El acto  de presentación y bautizo de la obra “EL CÍRCULO VALENCIANO” de Carlos Alarico Gómez, contó como madrina con la doctora Ingrid Angulo Arismendi, acompañados de la directiva del Club Médico de Caracas, el Círculo de Escritores de Venezuela y distinguidas personalidades del medio literario, histórico y cultural.
* publicada nota en la web WWW.NOTICORP.COM
 

domingo, 21 de octubre de 2012

HOSPITALES MILITARES PROVISIONALES EN CARACAS (2/10)



SERIES: HOSPITALES MILITARES EN CARACAS 

Cnel. (Ej) Dr.Arturo López Ramírez

Introducción

En la serie (2/10) hago mención de algunos hospitales que funcionaron provisionalmente relacionados a edificaciones militares de la época. 

SERIES: HOSPITALES MILITARES EN CARACAS 

Cnel. (Ej) Dr.Arturo López Ramírez

Introducción

En la serie (2/10) hago mención de algunos hospitales que funcionaron provisionalmente relacionados a edificaciones militares de la época. 


Hospital Militar. En la esquina de Cuartel Viejo
Hospital Militar, anexo al Cuartel de Milicias  (hoy de Hospital a Hoyo).
Cuartel San Carlos un hospital Militar o enfermería (1812-21)
Hospital de Milicias Entre 1870 y 1883 funcionó el
Hospital Militar en la esquina de Mamey



   En la esquina de Cuartel Viejo, estuvo el   Cuartel Veterano, porque allí se alojaba la Guardia Veterana de Caracas. En 1785 la Guardia fue trasladada a un nuevo alojamiento situado en la parte alta del barrio La Trinidad, el llamado Cuartel San Carlos, cuya construcción se inició en 1780 y se terminó cerca de 1792. Éste fue habilitado en varias ocasiones como hospital militar. El antiguo cuartel (Cuartel Viejo) (hoy esquina de Cuartel Viejo) fue destinado por    un tiempo a Hospital Militar.
EL 19  de enero de 1810, la Junta Suprema del Gobierno de España dispuso construir un hospital militar en el sitio entonces conocido como San Lazaro Viejo, y trasladar los leprosos a la Casa Real del Amparo, esta disposición no fue acatada.
El terrible terremoto de Caracas de 1812 dañó seriamente los hospitales de Caracas, tanto civiles como militares, que habían tenido su origen en el siglo XVI. El Hospital de Caridad de Hombres había sido edificado por los Hermanos Neristas, que tenían su oratorio a poca distancia. Inmediatamente a su lado,  hacia el oeste  estuvo el Hospital Militar, anexo al Cuartel de Milicias  (hoy de Hospital a Hoyo). En esa oportunidad se habilitó en el Cuartel San Carlos un hospital Militar o enfermería , que duró hasta 1821.  Este  fue un  periodo realista en Caracas   (desde  la  Emigración a Oriente, iniciada  por Bolívar el 7 de Julio de 1814  y la entrada de Boves a Caracas el 16 de ese mes,  hasta la batalla de Carabobo). 
  Entre 1870 y 1883 funcionó el Hospital de Milicias en la esquina de Hospital, cerca de la Rotunda. Los linderos eran los siguentes:al oeste la calle Leyes Patrias (Calle norte 2-sur 2), al norte la calle Unión, al sur la Cárcel Pública, que después se denominó La Rotunda y donde hoy esta la plaza de La Concordia, y al este una casa de particulares en la esquina del Hoyo.
   En el sitio llamado primero la Viñeta de San Felipe, y luego simplemente la Viñeta, estaba una edificación,  en la esquina de Mamey, muy relacionada a la historia del General Páez y de Barbarita Nieves, luego de 1839, durante varios años estuvo un Hospital Militar y luego un Cuartel de Infantería. Desconocemos detalles sobre su comienzo y funcionamiento. El edificio fue demolido en 1939. 

 




martes, 16 de octubre de 2012

Libro: “EL CÍRCULO VALENCIANO”


Nuevo libro del historiador Carlos Alarico Gómez
“EL CÍRCULO VALENCIANO”
La maquinaria de poder de Cipriano Castro

El próximo sábado 20 de octubre será presentado el libro “EL CÍRCULO VALENCIANO” original del comunicador e historiador venezolano doctor Carlos Alarico Gómez, en las instalaciones del Club Médico de Caracas; y el domingo 28 de octubre el acto será en Valencia en el escenario de la Feria Internacional del Libro que organiza la Universidad de Carabobo.

La obra fue editada por el Círculo de Escritores de Venezuela y en ella se analizan los factores de poder que privaron durante el régimen de Cipriano Castro, especialmente la participación en su Gobierno del llamado “Círculo Valenciano”, que jugó un papel predominante en la conducción del país durante la primera década del siglo XX. Ese Círculo llegó a disponer de un inmenso poder, situación que es cuidadosamente revisada por el autor, en un estilo histórico-literario totalmente aferrado a la documentación que encontró en su acuciosa investigación, que contó con el apoyo del doctor Ramón Eduardo Tello, nieto del biografiado, “quien muy generosamente le permitió escudriñar en los papeles de la familia”; y de William Sullivan, historiador de la Universidad de Wisconsin, quien le proporcionó una data invalorable sobre el período estudiado, la cual obtuvo en fuentes norteamericanas. En la obra también se analiza la política venezolana desde la invasión de Los Sesenta iniciada el 23 de mayo de 1899 desde Cúcuta, hasta la caída del castrismo en la jornada del 19 de diciembre de 1908.

 Es de señalar que Carlos Alarico Gómez es profesor universitario, graduado en periodismo e historia. Sus estudios los efectuó en Venezuela, Italia y Estados Unidos, donde obtuvo sus títulos de licenciado, magister y doctor. Entre sus obras publicadas destacan; Miranda periodista, El papel de los medios en el Bloqueo de 1902, Historia de la Hegemonía Andina, El poder andino, Vida y tiempo de Renny Ottolina, El Museo de la Radio, El origen del Estado democrático en Venezuela y El Último Dictador. Algunas de sus obras han sido publicadas en España y Rumania y ha sido condecorado con las órdenes Andrés Bello, Andrés Eloy Blanco, Francisco de Miranda, José Antonio Páez, José Tadeo Monagas y Cacique Yare, habiéndole correspondido el honor de ser el primer escritor que  ha recibido la medalla Tomás Polanco Alcántara. 

 El acto  de presentación y bautizo de la obra “EL CÍRCULO VALENCIANO” de Carlos Alarico Gómez, contará como madrina a la doctora Ingrid Angulo, quien estará acompañada del personal Directivo del Club Médico de Caracas, del Círculo de Escritores de Venezuela –cuya Junta Directiva preside el autor- y de distinguidas personalidades del medio literario, histórico y cultural.

Nota: ese día estará a la venta el libro, al terminar el acto.



 

lunes, 15 de octubre de 2012





General Bartolomé Salóm, “el héroe de El Callao”
                       Bolívar lo denominaba: “El Arístides de América”

Eumenes Fuguet Borregales (*)
Puerto Cabello ha dado para sí y para la historia, muchos hijos ilustres que dignamente representan la porteñidad; de este importante grupo se nos presentan tres próceres, grandes embajadores que aportaron su ingente cuota de sacrificio y valor; mencionamos con orgullo al general en jefe Juan José Flores, al almirante Agustín Armario y al general Bartolomé Salóm, éste último bien denominado “El hombre de la virtud” por el distinguido académico y Cronista Oficial de Puerto Cabello, escritor de fina pluma, el doctor Asdrúbal González. Salóm vio la luz primera el 24 de agosto de 1780, cerca de la actual plaza que lleva su ínclito nombre, tercer hijo de los nueve del matrimonio de Don Manuel Salom y Doña María Borges. Realizado los estudios elementales, Bartolomé Antonio de la Concepción, se dedica al área comercial. El eco del 19 de abril de 1810 llega rápidamente el 21 de ese mes, logrando la incorporación de varios jóvenes a la gesta emancipadora. Salóm ingresa en mayo con el grado de subteniente de milicias.
Le corresponde motivar al joven Juan José Flores  abrazar la misma causa, quien por cierto diría en 1850: “Puedo lisonjearme sin orgullo de haber combatido desde mi niñez por la causa de la América”. El predestinado Salóm es ascendido a capitán en abril de 1811, combate como oficial de artillería a las órdenes del generalísimo Francisco “libertad” Miranda en la rendición de Valencia al haberse sublevado por desconocer por parte del soberano Congreso  la declaración de independencia el 5 de julio de 1811; el 13 de  agosto de 1811 ocupan la Plaza Mayor de Valencia, hoy Plaza Bolívar, donde  Miranda coloca por primera vez en combate terrestre la bandera por él diseñada,  acompañado de los jóvenes oficiales, el coronel Simón Bolívar y el capitán de dieciséis años Antonio José de Sucre, futuro Gran Mariscal de Ayacucho.
Con la Capitulación firmada en San Mateo el 25 de julio de 1812 por  José de Sata y Bussy representante de Miranda, se pierde la República nacida el glorioso 5 de julio; Salóm es hecho prisionero en Puerto Cabello en julio de 1813,  enviado encadenado hacia la prisión de la Cuatro Torres en Cádiz el 1ro de noviembre; durante la travesía enferma de gravedad, siendo dejado en el puerto mexicano de Veracruz.
Al mejorar su salud es utilizado en diversas actividades dentro del penal, que le permitieron lograr la amistad y confianza de algunos funcionarios, facilitando su escape hacia Jamaica y Cartagena de Indias, conocida como “la Heroica”, allá  se encuentra con el impertérrito jefe José Francisco Bermúdez conocido como “José Francisco Pueblo”. Durante ciento dieciséis días soportaron la acometida de las fuerzas del jefe realista Pablo Morillo. Al hacerse imposible la defensa de la fortaleza,  algunos oficiales optaron romper el cerco y con mejor suerte para algunos, dirigirse el 6 de diciembre hacia Haití e incorporarse al ejército que a las órdenes del Libertador, que contaba con el apoyo del capitán curazoleño Luís Brión y el presidente Alejandro Petión, denominado por Bolívar como “El Magnánimo”, se preparaba para incursionar sobre las costas orientales. Salóm es ascendido el 2 de marzo a Sargento Mayor-Mayor.
La referida expedición integrada por siete embarcaciones y doscientos cuarenta combatientes, la mayoría de ellos eran oficiales, de allí la denominación de “La Expedición de los Soñadores”, zarpó de los Cayos de San Luís en Haití el 31 de marzo de 1816; en su avance se lleva a cabo el 2 de mayo en el islote de Los Frailes,  cerca de la isla de Margarita un combate exitoso contra los navíos “Rita” e “Intrépido” de la flota realista. Al desembarcar en Carúpano el 1ro de junio; Bartolomé Salóm funda el Cuerpo Nacional de Artillería del Ejército, integrado por cinco oficiales, seis soldados artilleros y cuarenta soldados auxiliares. Bolívar continúa con Salóm hacia Ocumare de la Costa, desembarcando el 6 de julio, quedándose solo, ya que las embarcaciones sin su autorización salieron a reaprovisionarse, y el coronel Carlos Soublette había salido en la noche con quinientos setenta soldados hacia los Valles de Aragua, Salóm iba en ese grupo.
Bolívar es salvado de suicidarse por el marino Juan Bautista Bideau, que en ese momento llegaba a la costa y lo lleva a Bonaire, regresando  a los pocos días a Choroní. Soublette en el avance ocupa Maracay el 7 de julio, por su parte el jefe realista Francisco Tomás Morales procedente de Valencia combate y derrota a Soublette en las alturas de Los Aguacates el 14 de julio de 1816. El general Gregorio Mac Gregor, teniendo de segundo a Soublette avanza hacia el centro y oriente, actividad  conocida como la Retirada de los seiscientos, jalonada de triunfos a partir del 17 de julio cuando vencen al comandante Quero en el Valle de Onoto,  en El Alacrán el 6 de septiembre derrotan al coronel Rafael López, y en El Juncal cerca de Barcelona  al general Francisco Tomás Morales.
El denodado porteño participo activamente en la liberación de Guayana en 1817 a las órdenes del general Manuel Piar; triunfan en San Félix el 11 de abril, combate contra el general Miguel de La Torre, utilizando en forma exitosa el binomio soldado-indio, utilizando flechas, lanzas, armamento y caballería. Piar asciende a Salóm al grado de coronel, siendo ratificado por el Libertador. Durante la Campaña del Centro realizada en 1818, Salóm estuvo encargado de la artillería; continúa a las órdenes de Bolívar en la ejecución de la extraordinaria Campaña de la Nueva Granada en 1819, salida desde Mantecal en los llanos apureños el 27 de mayo; atraviesan el páramo de Pisba a casi cuatro mil metros de altura, perdiéndose todos los caballos y mulas; las piezas de artillería se perdían al caer a los desfiladeros o se atascaban, retardando el avance; en Socha reciben cabalgaduras y atenciones por parte de los habitantes. Bolívar aplicaba el Principio de la Guerra de la Sorpresa, es decir atacar al enemigo por donde menos lo espera. Combaten en Los Corrales de Bonza, en Gámeza el 11 de julio, Pantano de Vargas el 25 de julio y Boyacá el 7 de agosto de 1819 para liberar a la Nueva Granada. Al suceder la muerte del joven barcelonés  general José Antonio Anzoátegui en Pamplona el 15 de noviembre de ese año, Bolívar designa a Salóm Comandante del Ejército del Norte. En los preparativos de la batalla de Carabobo, nuestro  biografiado es nombrado Sub jefe del Estado Mayor del Ejército Libertador.
Un Bolívar triunfante, selecciona a Salóm para que lo acompañe en la  emancipación de los pueblos oprimidos del Sur del continente. Recibe el merecido ascenso de general de brigada en Popayán el 25 de febrero de 1822; combaten en Bomboná el 7 de abril de ese año contra el coronel Basilio García. Ejecutada en Ayacucho el 9 de diciembre de 1824, “Gloria de la cumbre Americana”, la gran batalla dirigida por el general de división Antonio José de Sucre, futuro Gran Mariscal de Ayacucho, el general José Ramón Rodil  jefe de la fortaleza del Real Felipe de El Callao-Perú, no aceptó la capitulación, permaneciendo sitiado por Salóm hasta el 22 de enero de 1826, después de trece meses de tenaz cerco.
El gobierno peruano le otorgó la Medalla de Honor y el Libertador por su parte lo asciende a general de división. Al retornar a Venezuela ocupa diferentes cargos administrativos en Carabobo, Cumaná y Maturín. Cuando sucede el movimiento separatista en 1826 conocido como la Cosiata, Salóm no se plegó,  manteniéndose leal al Padre de la Patria, igualmente actuó con firmeza contra la Revolución de las Reformas que buscaba destituir en la presidencia al sabio doctor José María Vargas.
Había casado en Puerto Cabello con Doña Carmen Josefa Sereno el 16 de noviembre de 1843, procrearon a Simón Cincinato y Carmen Magdalena; Vivieron varios años en San Esteban. A Bartolomé Salóm de nuevo le son recompensados sus méritos por la emancipación suramericana con el ascenso a general en jefe  el 13 de junio de 1863.
Fallece el ilustre paladín en la residencia de su yerno Juan Antonio Segestaa´el 30 de octubre de ese año. Sus restos ingresan al Panteón Nacional, “Recinto de nuestros ilustres paisanos” el 5 de julio de 1909. El Grupo de Artillería ubicado en Maracay, una fragata misilística, el Comando de Guardacostas, una honrosa Condecoración porteña, parroquias en Puerto Cabello y Nirgua, instituciones públicas y privadas, incluyendo  el aeropuerto se honran llevar su  preclaro nombre. Bolívar lo denominaba: “EL ARÍSTIDES DE AMÉRICA”, porque era sinónimo del hombre justo como el gran personaje de la Grecia antigua.  Herodoto consideraba a Arístides como: "el mejor y más honorable hombre de Atenas".
Al referirse al general en jefe José Antonio Sucre en Cúcuta, el 20 de septiembre de 1820, cuando O´Leary preguntó ¿Quién es ese mal jinete que se aproxima?, Bolívar contestó: “Es Sucre, uno de los mejores oficiales del ejército, reúne los conocimientos de Soublette, el bondadoso carácter de Briceño Méndez, el talento de Santander y la aptitud de Salóm”. Este incansable paladín emancipador una vez cumplida la gran misión, mantenía en todo  momento un comportamiento  ejemplar, sin ambiciones, ya que su riqueza era su pobreza y rectitud. Le cupo el honor histórico de dar los primeros disparos en 1811 en las acciones de rendición de Valencia y los últimos  de la emancipación suramericana, sitiando y rindiendo  la fortaleza del Callao el 22 de  enero de 1826.
Bartolomé Antonio Concepción Salóm Borges, nos dejó una enseñanza en palabras que le diría a nuestro Libertador.
 “Mi vida es mi Patria y perderla sirviéndola es un deber”.
Trascendiendo la historia
*Gral. de Bgda.
Vicepresidente de la Academia de Historia del estado Carabobo
Asesor Nacional de la Sociedad Divulgadora de la Historia Militar de Venezuela

Bandera venezolana

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Automóviles de los 40

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